domingo, 26 de agosto de 2007
domingo, 19 de agosto de 2007
Carta de Lectores publicada en el diario La Nación
También murieron asesinados una anciana vecina, Margarita Obarrio de Vila, el Sr. Ricardo Alvarez y resultaron heridas 10 personas. La destrucción del edificio fue casi total, lo que ocasionó su demolición unos meses después.
Hoy, están siendo demolidos los cimientos de la historia reciente de la Argentina, contándole a las nuevas generaciones una historia que dista mucho de ser la verdadera.
Lamentablemente en este reescribir la historia, falta una parte fundamental del conflicto armado que sufrió la Argentina en los años 70, faltan las Víctimas del Terrorismo.
Aquellos argentinos como Paula que eran parte de la población protegida por los Convenios internacionales y hoy siguen sin derechos, sin dignidad ni reconocimiento por parte del Estado argentino.
Cada 1º de agosto que pasa, Paula muere nuevamente y con ella se aleja la posibilidad de que Argentina pueda superar algún día este pasado trágico y oriente su mirada hacia el futuro venturoso que unas manos todavía impunes le arrancaron a Paula y a una generación de argentinos.
Victoria Villarruel
www.celtyv.blogspot.com
celtyv1@gmail.com
Por las Víctimas del Terrorismo, por sus Derechos, por la Verdadera Historia, por nuestra Argentina!
Publicadas por CELTyV Argentina a la/s 7:04 p. m. 1 comentarios
jueves, 2 de agosto de 2007
LOS NIÑOS Y ADOLESCENTES ASESINADOS POR EL TERRORISMO EN ARGENTINA
Fue una voladura de 2 edificios de departamentos, luego demolidos, ejecutada por terroristas montoneros del Pelotón de Combate Especial “Eva Perón”, para atentar contra la familia del Vicealmirante Armando Lambruschini, que vivía en Pacheco de Melo 1963/69 Piso 3º “B” de Capital Federal.
Los integrantes del ejército montonero, atracaron una poderosa carga explosiva en la medianera del 2º piso de Melo 1959 que detonaron a la 1.40 de la madrugada, presumiendo que la familia estaría toda durmiendo, pero asesinaron a Paula Lambruschini de solo 15 años, hija del marino y a la Sra. Margarita Obarrio de Vila de 82 años, hiriendo de extrema gravedad al Sr. Ricardo Alvarez, (que un día después fallecería por las importantísimas heridas recibidas).
Durante meses estuvo cortada la calle de esa cuadra hasta la demolición de ambos edificios, ante la imposibilidad de su reparación.
Uno de los principales diarios argentinos, CLARIN, en su Editorial del 2 de agosto de 1978, decía: “Ante el artero atentado. El atentado terrorista ocurrido en la madrugada de ayer no solo reúne todas las características de una desesperada expresión de paranoia ante la derrota irreversible que advierten sus autores, sino que además, pone de relieve su intención de buscar efectos dramáticos ante la opinión pública general. ... ninguna motivación racional puede encontrarse ante esta expresión superlativa de ejercicio de la crueldad, llevada a extremos tales de irresponsabilidad y de cobardía que agota todos los calificativos. ... Esta es la hora, en suma, de terminar con los restos de la subversión, quitándole toda posibilidad de recuperarse. En esa empresa se ubica todo el pueblo argentino...”.
La Sra. María de Benson, madre de 4 niños menores de 6 años, que vivía 2 pisos arriba de la familia Lambruschini, decía: "Tomás, mi bebé, estaba muy inquieto y no podía dormir. Lloraba mucho y lo levanté de la cuna. En ese momento explotó la bomba. Allí precisamente sobre la cuna, cayeron todos los vidrios de la ventana. El camisón empezó a mancharse de sangre y me di cuenta de que algunos vidrios se me habían clavado en el cuerpo. Mi marido, saltó de la cama, y corrimos a la ventana. Vimos a una mujer completamente histérica que gritaba "Asesinos, asesinos" y los autos con sirenas que empezaron a llegar. Coches de policías, ambulancias, bomberos... Mis hijos no dejaban de llorar. ...Había mucho olor a pólvora y un polvillo rojizo lo cubría todo. Entonces descubrí que la pared de mi cuarto estaba rajada y tuve miedo de que se derrumbara todo el edificio". *
Publicadas por CELTyV Argentina a la/s 1:30 a. m. 6 comentarios